Cáncer gástrico en el Complejo Hospitalario Universitario de Vigo en el periodo 2003-2007¿dónde estamos? ¿hacia dónde vamos?
- Francisco Barreiro Morandeira Director
Universidade de defensa: Universidade de Santiago de Compostela
Fecha de defensa: 25 de outubro de 2014
- Miguel Caínzos Fernández Presidente
- José Enrique Casal Núñez Secretario
- Felipe de la Cruz Vigo Vogal
- Manuel Armengol Carrasco Vogal
- Javier Padillo-Ruiz Vogal
Tipo: Tese
Resumo
En los últimos decenios se ha producido una disminución progresiva de la incidencia de cáncer gástrico, aunque sigue siendo una neoplasia frecuente que se sitúa como quinta causa de muerte por cáncer en el mundo. Al mismo tiempo, parece evidenciarse migración de la localización distal a proximal y cambios del patrón histológico, con disminución del tipo intestinal. En occidente el diagnóstico se suele realizar en estadios avanzados, lo que influye negativamente en las expectativas de curación, a pesar del progreso terapéutico multimodal. Es un tumor que se presenta con mayor frecuencia a partir de la séptima década de la vida, y es cada vez más frecuente la necesidad de intervenir a pacientes con edades superiores a los 80 con patologías mayores asociadas. La sintomatología, muchas veces inespecífica, induce con frecuencia a tratamientos sintomáticos sin las exploraciones pertinentes, retrasando el diagnóstico. En Occidente, debido a una incidencia mucho menor, no se justifican programas de cribado poblacional como se realizan en Japón y Corea y que han permitido un aumento neto de diagnóstico en estadios precoces. Sería útil identificar �grupos de riesgo� para establecer programas de diagnóstico más temprano y menos costosos. Defendemos la realización de una gastroscopia a todo paciente mayor de 50 años con sintomatología no esporádica. Hemos revisado 325 pacientes intervenidos en el periodo 2003-2007 en el área del Complejo Hospitalario Universitario de Vigo y se comparan los resultados con los presentados en el estudio multicéntrico gallego del año 2000. La incidencia disminuyó de forma discreta, predominó la localización inferior y media y los estadios avanzados. Su frecuencia fue mayor a partir de los 70 años, siendo ocasional en los menores de 50. La clasificación TNM sigue teniendo un papel pronóstico indiscutible. El parámetro ganglionar N suele ser la controversia que motiva cada 3 o 4 años un cambio de la clasificación tumoral. La creación de unidades funcionales multidisciplinarias con interés común en esta patología es fundamental para mejorar los resultados. Se demuestra en nuestra serie, donde existe un predominio de linfadenectomías D2 y menor mortalidad operatoria en el grupo de la Unidad Esofagogástrica. Defendemos un protocolo terapéutico adecuado a las características del paciente, entre las que tienen particular importancia la edad y la presencia de patología mayor asociada. La morbimortalidad en nuestra serie fue mayor en el grupo de más de 80 años. La linfadenectomía D2, que aporta mayor información sobre el estadiaje, debe ser realizada por cirujanos entrenados, en pacientes sin alto riesgo y sobre todo en estadios intermedios donde además puede ofrecer beneficio terapéutico.